¡Feliz día gente trabajadora! Hoy estamos de celebración y sheldrysaez.com no se podía perder esta fecha.
El Día Internacional de los Trabajadores o Primero de Mayo es la fiesta del movimiento obrero mundial. Nace a raíz del reclamo de los trabajadores al pedir la reducción de la jornada laboral a 8 horas, cuando lo "normal" para esa época era trabajar entre 12 y 16 horas. Por tal razón, se llevó a cabo una protesta en donde se reunieron alrededor de 80.000 trabajadores desembocando en una fuerte huelga nacional que afectó a muchas fábricas de los Estados Unidos. Lamentablemente esto ocasionó varias muertes. Así es como los trabajadores marcaron un antes y un después en la historia, conmemorando como el "Día del Trabajador" cada primero de mayo, el cual se celebra en casi todo el mundo.
Para ampliar este artículo, viajé al interior e investigué un poco sobre diferentes trabajos que conllevan arduo esfuerzo. Así fue como conocí a Robin, Ramón y Wilfredo.
Robin Pérez es jardinero desde hace 10 años. Desde niño le gustaba la jardinería y se ve ejerciendo esta profesión por el resto de su vida porque ama lo que hace. A sus 48 años, este jardinero chitreano se levanta todas las mañanas para empezar su jornada de lunes a domingo. A eso de las 6:30 a. m., desayuna y amarra su máquina a la bicicleta para salir a atender los jardines de su clientela que lo conoce desde hace algún tiempo; no es necesario que lo estén llamando, el llega directo a las casas y ya lo están esperando. Robin se destaca por ser muy curioso en la jardinería, le gusta ver todo limpio y bonito.
Ramón Calderón es un pescador de Rosario que ejerce esta profesión desde los 12 años, siguiendo los pasos de su padre. Considera que lo más difícil de pescar son los vientos y las mareas que a veces hacen la tarea difícil. Este pescador de 34 años trabaja de noche, a veces sale en la tarde y no regresa hasta el día siguiente pues desde las 10 de la noche hasta la madrugada es su tiempo de pesca. El resto de las horas duerme en la lancha.
Wilfredo Santos, es un chapistero muy querido de Los Santos. A sus 43 años, puede decir que está muy feliz en su profesión. Tiene su propio taller de chapistería en el cual trabaja de lunes a domingo. Ser chapistero es una profesión que su papá le enseñó desde niño y lo ha ejercido toda su vida. Lo que más le gusta de su profesión es lidear con los autos, y ha aprendido mucho de las diferentes personas que ha conocido en su trabajo.
De estas tres personas trabajadoras, pude notar algunas cualidades en común que me llamaron mucho la atención: ejercen trabajos heredados de sus padres o que aprendieron desde niños, aman lo que hacen al punto de que se ven ejerciendo la profesión que eligieron hasta el fin de sus días; y los tres fueron muy serenos y positivos a la hora de entrevistarlos. Cuando les pregunté lo que menos les gustaba de su profesión y si habían tenido algún percance en su trabajo que los haya afectado, los tres respondieron con mucha sencillez, que no les había ocurrido nada grave y que han hecho lo que hacen desde siempre. ¡Que lo disfrutan!
Para ellos la vocación y la excelencia en su trabajo es muy importante. Me encantó conocer a Robin, el jardinero, porque cuando habló con tanto énfasis que le encanta ver todo bien cuidado y dejar las plantas hermosas, recordé que todos buscamos el éxito. Para mi papá el éxito es vender muebles en su negocio, para mi hermana crecer en la música, para Robin es dejar los jardines impecables.
Luego al entrevistar a Ramón, el pescador, recordé que todos debemos esforzarnos mucho sin importar el trabajo que realizamos. Algunos se esfuerzan estudiando para llevar la última tecnología a su trabajo, otros hacen ejercicios varias veces al día entrenando a sus clientes; para Ramón, su esfuerzo es quedarse largas horas de noche en el mar, esperando una pesca productiva.
Y concluyo con Wilfredo, quien se encontraba con una hermosa familia en una casa muy linda y acogedora ubicada al lado de su taller. Él me recordó que debemos atrevernos a ser grandes en lo que hacemos. Wil heredó la profesión de su padre, pero se hizo tan experto que levantó su propio taller.
Los padres tienen una gran responsabilidad porque abren el camino que luego andarán sus hijos. Aun así, quiero exhortar a todos mis lectores, para que escogan como profesión lo que realmente les apasiona, ese campo donde sientan que se desempeñarán con entusiasmo, alegría y sobre todo con mucho profesionalismo. Es una decisión personal que te acompañará por el resto de tu vida, así que debe ser seleccionada con determinación.
También quiero recalcar, que el éxito no tiene estándares. El millonario que inventó una red social no es más exitoso que tú porque aún no eres millonario, ni la cantante super famosa es más exitosa porque es popular y tú no lo eres. El éxito es ser feliz y lograr disfrutar de los pequeños detalles de la vida de la mano con la excelencia en tu trabajo, independientemente del que sea. Cuando estás conforme con lo que tienes, eres exitoso. Y si no estás conforme, entonces trabaja por estarlo. Hay quienes les gusta una vida sencilla, sin tanto estrés; hay otros que prefieren una agenda apretada y el último modelo de auto estacionado en su garaje. Ninguno de los dos casos está mal, es una decisión que toma cada uno de acuerdo a su visión. ¡Eso merece un respeto!
¡Vamos por nuestros sueños! Que hoy, Día del Trabajador, sea un día para prometernos a nosotros mismos ser cada día una mejor versión en nuestra profesión.
Besos,
Escribe la vida que deseas y organízate para lograrla. Recuerda que tu marca personal es la marca más importante de todas.
IR A TIENDA¡Inspirando a mujeres a organizarse para su Proyecto de Vida!
© 2021, Sheldry Saez | Todos los derechos reservados.
Sitio web desarrollado por MiGuayaba.com