¿Tienen idea de cuánto tiempo estuve esperando este momento? Aquí les va la historia:
Empecé mi carrera a los 18 años, específicamente en el año 2010. Recién llegaba de Nueva York y me matriculé enseguida, pues al ocupar puesto de honor en secundaria, me gané una beca.
Este regalo lo perdí, ya que no fue posible llevar mi plan de estudio al pie de la letra y la beca es válida solo si tomas tus estudios sin interrupciones. Y la verdad… ¡No me arrepiento ni un segundo!
Empecé mi carrera de Licenciatura en Mercadotecnia un tercer cuatrimestre ya que los primeros meses del año estuve modelando en New York. En el 2011 participé en Miss Panamá así que tuve que posponer los estudios por un tiempo.
Cuando regresé del Miss Universo mi vida cambió y se me presentaron muchas oportunidades que no dudé en tomar; así que, desde ese momento, la universidad se convirtió en mi Plan B.
Un Plan B que nunca dejé, porque seguía siendo un plan; sin embargo, lo hice a mi ritmo sin nunca abandonar mis pasiones y oportunidades del momento. “El tiempo que se va no vuelve” es una frase tan cierta, a la cual hay que ponerle más atención.
Pienso que si tu carrera es Medicina, Derecho o alguna otra que exige mucha teoría, cumple al pie de la letra tu curso universitario; pero si tu carrera es como la que yo elegí: “Mercadeo y Publicidad”, entonces sal a la calle porque el mundo del mercadeo cambia todos los días.
¡Sí! Las bases se mantienen y por eso no está de más la universidad; pero si no ganas experiencia y pateas calle, entonces tampoco te prepararás de verdad para enfrentarte al mercado laboral.
Los 20 años ya no son como antes. Antes un joven de 20 a 25 años vivía en casa con sus padres, se dedicaba a prepararse y no se metía en asuntos de adultos. Hoy, a los 20 años ya eres un adulto porque el mundo va muy rápido y la tecnología nos exige ir a tal velocidad.
Ya tenemos jóvenes empresarios, emprendedores y exitosos antes de los 30 años, incluso, políticos… Es decir, no te estanques en un aula de clases 24/7. ¡Sal a la calle!
Aprovecha tu juventud, tu edad más productiva, cuando las oportunidades están por todos lados… Ser joven no significa que el tiempo se detiene, el tiempo sigue pasando y un día dejarás de ser joven. ¡Aprovecha el tiempo!
Han pasado 8 años, y finalmente hoy logro este requisito que la sociedad te pide: tener un título universitario.
Durante estos 8 años también fui cuestionada porque aún no había culminado mi carrera; pero yo estaba segura de mis decisiones. Y hoy me gradúo con logros alcanzados, sueños cumplidos y un camino ya recorrido que jamás me lo hubiese dado 8 horas diarias sentadas en un aula de clase.
Eso sí, NO abandones tus estudios y con esto me refiero a: toma seminarios cada vez que puedas para actualizarte, LEE, aprende de los demás, y NO TE DETENGAS.
Los 20 años no son para quedarte toda la tarde acostado(a) viendo tele, son los años en los que puedes arriesgarte, cometer errores y aprender de ellos para crecer con más sabiduría y esa claridad mental es la que te hará tomar decisiones de éxito.
Por otro lado, como joven puedo decir que hay mucho por mejorar en nuestros modelos educativos. Batallé 8 años contra la burocracia, métodos arcaicos y mentalidades cerradas. Es como si en la universidad te quisieran poner barreras y hacerte la vida más difícil.
¡Abran los ojos! La nuevas generaciones aprenden todos los días por todos lados; la universidad debe ser más amigable para el joven porque hoy en día es un reto tomar una carrera universitaria cuando hay tanta información útil al alcance y cuando ya es casi obligatorio trabajar desde joven en una economía cambiante.
Siempre fui estudiosa, mejor dicho, siempre fui “COME LIBROS”. Cuando me gradué de secundaria pensé que haría mi carrera universitaria en tres o cuatro años como lo usual; pero cuando te enfrentas a la vida, te encuentras con más de lo que dice un libro.
La vida requiere de análisis, de adaptarse a cambios, de diversificarse. Y en estos años aprendí como nunca antes que no hay universidad más efectiva que la VIDA MISMA.
¡Ojo! Esta NO es una invitación para que no vayas a la universidad, porque de que aprendes algo aprendes; además, la vida da muchas vueltas, vete a lo seguro y ten tu título.
Esta más bien es una invitación para que no te conformes con solo ir a la universidad y menos a calentar bancas. Combina tus estudios con un plan que puedas ejecutar poco a poco para la realización de tus sueños. ¡Mira más allá! ¡Piensa en grande! ¡Despierta!
No me quiero despedir sin antes dar los respectivos agradecimientos: Agradezco a Dios por mantenerme sana, a mis padres por confiar en mis decisiones y soñar en grande a mi lado, a mi hermana por ser la mejor compañera de vida y a cada una de las personas que de una manera u otra fueron apoyo durante mi carrera universitaria. Quienes vivieron esta etapa a mi lado conocen el reto que fue: perdí materias, lloré, me desvelé; pero aquí estamos porque lo que se empieza se termina. ❤👩🏻🎓📚
Gracias también a los profesores y colaboradores que dejaron buenos recuerdos, enseñanzas y herramientas para aplicar en mi vida personal y profesional. Fue fascinante compartir con tantos compañeros de clase, sin pena les confieso que hice parte de grupos de diferentes generaciones… muchos ya se graduaron hace varios años, otros deben estar por culminar… y es muy interesante conocer las diferentes formas de ver la vida.⚡
¡El tiempo de Dios es perfecto! Estoy feliz de graduarme este año, después de caerme y levantarme varias veces en la universidad de la vida; de la mano de mi hermana @dayanasaezb y ambas formando parte del Capítulo de Honor. 💪🏼 ¡Sí se puede! ¡Organízate y esfuérzate!
También se gradúa mi cuñado @gioscollo 🙌🏻.
¡Que emoción vivir llena de sueños! Esto es solo gasolina para el viaje baby!!! ✨ Que se agarre el mundo que aquí vienen con más fuerza tres soñadores incansables. 🏆🏅 www.sheldrysaez.com #inspírate
Besos,
Licenciada Sheldry
Escribe la vida que deseas y organízate para lograrla. Recuerda que tu marca personal es la marca más importante de todas.
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